
La movilidad hace parte de la competitividad de un territorio.
Por eso, recibimos con gran expectativa la presentación del Plan Maestro de Movilidad Sostenible y Segura de Armenia, elaborado en una alianza entre la Alcaldía de Armenia y la Universidad del Quindío. Este proyecto es una hoja de ruta ambiciosa que propone transformar la manera en que nos desplazamos, interactuamos y vivimos en la ciudad.
Vale la pena recalcar la visión con la que se diseñó este plan: una Armenia con movilidad consciente, donde las vías sean más inclusivas y respondan a las necesidades del crecimiento turístico y comercial de la ciudad. En resumen, se habla de un transporte sostenible, con infraestructura adecuada, que nos acerque a los estándares de ciudades altamente competitivas en términos de movilidad y urbanismo.
Sin embargo, lo más importante de este plan, además de socializarlo, es no archivarlo; en síntesis, llevarlo del papel a la acción.
Está claro que la construcción del Plan Maestro ha sido rigurosa: actualización de matrices origen-destino tras más de 17 años, diagnósticos de volúmenes vehiculares, encuestas a hogares, talleres de participación ciudadana, entre otros. Su fortaleza radica en esa seriedad técnica y sensibilidad ambiental.
Destaco aspectos clave como la modernización del transporte público, el ordenamiento del tránsito vehicular, la integración de los municipios vecinos en un sistema metropolitano y la respuesta a los desafíos reales que enfrenta Armenia en su crecimiento urbano.
Esto último amerita vías e infraestructura bien definidas, que incluyan zonas azules, amarillas, de cargue y descargue, así como una cultura ciudadana en torno al uso de parqueaderos formales y esquemas contundentes para quienes no cumplan con el adecuado parqueo vehicular. Un escenario que se debe abordar desde la educación ciudadana, la señalización adecuada, y una gestión de tránsito efectiva.
El verdadero éxito de este plan dependerá de la capacidad de gestión por parte de los entes gubernamentales, que permita iniciar y mantener los estándares proyectados.
Sin irnos muy lejos, ya vemos cómo la realidad de la carrera 14 – Cielos Abiertos, en su fase uno, fue exitosa, y hoy demanda un mantenimiento constante y profundo para lo que fue concebida. Proyectos de esta categoría no pueden depender de períodos gubernamentales, sino de sistemas de mantenimiento estratégico que hagan perdurar lo ejecutado, marcando un compromiso de ciudad permanente, apropiable y adaptable en el tiempo.
En conclusión, desde la Cámara de Comercio de Armenia y del Quindío, consideramos que este plan debe trascender gobiernos, administraciones y calendarios políticos. No podemos reiniciar la discusión de la movilidad cada cuatro años. El compromiso con este proyecto debe convertirse en política pública.
El sector empresarial está listo para ser parte activa de esta transformación. Podemos apoyar de múltiples maneras: impulsando la movilidad corporativa sostenible, participando en esquemas de proyectos estratégicos, contribuyendo a una cultura ciudadana que valore la movilidad consciente y respetuosa, y generando veeduría en las obras de infraestructura y vías proyectadas, entre otras acciones.
Además, proponemos la creación de una Mesa Permanente de Seguimiento a la Movilidad: un espacio donde gobierno, academia y empresa privada revisemos periódicamente los avances del Plan Maestro, identifiquemos cuellos de botella, propongamos soluciones y ayudemos a garantizar su continuidad.